Basta con aperturas fatigosas, o bajo la lluvia: un toque en el mando a distancia y la puerta se abre y cierra de manera totalmente segura.
Las puertas de garaje seccionales son de apertura vertical. Se deslizan hacia arriba y después a lo largo del techo, sobre guías específicas y, por este motivo, son la solución ideal cuando el espacio es limitado o cuando el garaje se abre frente a la calle, directamente sobre la acera.
Puedes abrirla y cerrarla aunque el automóvil esté aparcado casi en contacto con la misma puerta.
Además, las puertas seccionales actuales tienen un coeficiente de aislamiento térmico elevado; ofrecen un aislamiento óptimo contra el calor y el frío gracias al aislamiento térmico de los paneles, y contribuyen a ahorrar energía.
Sistema de desbloqueo biestable para un facilidad de movimiento total en caso de apagón eléctrico. Es suficiente girar una simple palanca y la puerta se puede levantar si fatiga.